El excentral del Sevilla FC, Joris Gnagnon, demandó al club hispalense por haberlo despedido en agosto de 2021. El conjunto de Nervión decidió rescindir el contrato del jugador alegando falta de profesionalidad demostrada de manera manifiesta. Gnagnon ha tenido problemas con el peso, falta de implicación e indisciplina. Gnagnon tenía un contrato con el club sevillista hasta 2023 y un salario de 1,4 millones por temporada.
Antes de tomar la decisión de despedirlo, el club le abrió varios expedientes, pero el jugador fichado en verano de 2018 demostró en todo momento no querer encauzar su carrera deportiva. El pasado 30 de noviembre se celebró una vista en el Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación pero ambas partes no llegarón a ningún acuerdo.
Este pasado 25 de abril iba a ser el juicio en los Juzgados de lo Social, pero Gnagnon por medio de sus abogados, ha anunciado a la otra parte que se iban a desistir de la demanda de despido planteada contra el Sevilla FC. Ahora solo queda el litigio en FIFA. En el caso de salir ganador el Sevilla, este se ahorraría cerca de cinco millones de euros por las temporadas de contrato que le quedaban al jugador.