

Cada vez que el calendario ofrece un respiro, por pequeño que sea, se intensifican las labores de mejora y renovación en cualquier espacio del Ramón Sánchez-Pizjuán. En este caso, como cada mes de octubre, le ha tocado el turno al propio terreno de juego, ya que en los últimos días se ha llevado a cabo la siembra del césped de invierno. La operación, siempre bajo la supervisión del greenkeeper del Sevilla FC Carlos Venegas, consiste en sembrar semillas de una modalidad de césped que se adapta mucho mejor a las temperaturas del invierno sevillano, mientras que el tipo de césped de verano va desapareciendo progresivamente del terreno de juego.